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Procedimientos para mantenerse a salvo en los programas de la primera infancia

El propósito de los procedimientos para mantenerse a salvo es preparar a los maestros y al personal del programa para que mantengan la calma, tomen el control y den apoyo a los niños y adultos durante una crisis, en lugar de no saber qué hacer y sentirse abrumados e indefensos. Es útil y necesario que el personal de los programas de la primera infancia estén familiarizados y practiquen sus procedimientos para mantenerse a salvo. La práctica ayuda a los adultos a prepararse, y practicar simulacros para mantenerse a salvo puede empoderar al personal y puede salvar vidas.

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Los procedimientos para mantenerse a salvo se refieren a lo que otras organizaciones podrían llamar protocolos de "cierre de emergencia", "intruso violento" o "francotirador activo". Considere cuidadosamente las palabras que su programa utiliza para nombrar estos simulacros y procedimientos. El término "mantenerse a salvo" refleja un lenguaje apropiado para el nivel de desarrollo de los niños pequeños.

Sin embargo, los simulacros que no consideran las necesidades de desarrollo de los niños podrían causar angustia adicional. El personal de la primera infancia puede minimizar la angustia al tener en cuenta el desarrollo de los niños pequeños y brindar apoyo emocional a todos los involucrados. Este recurso describe los componentes clave para incluir en los procedimientos de mantenerse a salvo y destaca las consideraciones para el desarrollo, las necesidades sociales y emocionales (en inglés) de los niños más pequeños.

Lo que sabemos sobre los simulacros para mantenerse a salvo y los niños pequeños

Los simulacros para mantenerse a salvo son ahora una práctica estándar en la mayoría de los sistemas escolares de K-12. Existen modelos sobre cómo realizar simulacros con estudiantes de primaria y secundaria, pero no hay casi ninguna investigación sobre las necesidades únicas de los niños más pequeños.

Los niños pequeños miran lo que hacen los adultos para dar sentido al mundo que los rodea. Observan de cerca las expresiones faciales y escuchan el tono de voz de sus cuidadores para saber cómo sentirse, comportarse y comprender una situación. Es importante que los adultos sepan cómo regular sus propias emociones para que se sientan tranquilos y puedan apoyar a los niños bajo su cuidado.

Los maestros y las familias son quienes mejor conocen a los niños. En consonancia con la práctica apropiada para el nivel de desarrollo en los entornos de la primera infancia, los adultos deben considerar que las capacidades de desarrollo de los niños varían y que cada niño tendrá necesidades diferentes. Los niños con discapacidades o necesidades complejas podrían necesitar más apoyo para entender un simulacro. Los niños que han tenido un trauma también podrían necesitar apoyo y seguridad emocional adicional acerca de que los simulacros son oportunidades para practicar cómo mantenerse a salvo. Los niños que aprenden en dos idiomas necesitarán aprender los términos y conceptos con frases de su lengua materna.

Los lineamientos en torno a este tipo de simulacros aún están surgiendo y evolucionando continuamente. Cuanto más aprendamos sobre cómo mantener a los niños a salvo, y cómo los adultos y los niños responden a tales simulacros, más certeros y útiles serán nuestros procesos para mantener a los niños seguros.

Planificación de los simulacros para mantenerse a salvo

Es esencial determinar qué procedimientos para mantenerse a salvo funcionarían mejor para sus situaciones particulares y en función de su programa, personal, niños y familias. Su equipo de preparación, respuesta y recuperación ante emergencias puede trabajar junto con el liderazgo de su agencia local, el Consejo de políticas, la policía, los consultores de salud mental y otro personal de apoyo para tomar estas decisiones. Las siguientes secciones presentan preguntas a considerar y sugerencias para cada uno de los tres temas clave: preparar, compartir y practicar.

Preparar

¿Cuenta con las personas adecuadas para crear, informar y aprobar el plan de seguridad para mantenerse a salvo?

  • ¿Quiénes son los miembros clave de su equipo de planificación?
  • ¿Cómo está haciendo participar a los siguientes grupos?
    • Personal y líderes del programa
    • Policía local
    • Consultores de salud mental y otros expertos en preparación, respuesta y recuperación ante emergencias
    • Comité Asesor de los Servicios de Salud
    • Consejo de políticas
  • ¿Hay otros expertos de la comunidad a quienes desearía consultar?
  • ¿Cómo está haciendo participar a las familias en su programa?

¿Cómo mantendrá seguro el espacio físico?

  • ¿Cuál es el espacio más seguro (lejos de ventanas y puertas) para refugiarse en el lugar? ¿Varía esto en el programa en función del diseño único de las aulas o los espacios de juego al aire libre?
  • ¿Cuáles son sus procedimientos para las siguientes situaciones?
    • Mantener a un intruso fuera del aula (p. ej., bloquear o trabar las puertas)
    • Manejar otros elementos de seguridad en el aula (p. ej., cerrar las persianas, apagar las luces)
  • ¿Cómo decidirá si lo mejor es refugiarse en el lugar o salir del edificio por seguridad?
  • Si se evacua, ¿dónde será el punto de encuentro?
  • ¿Cuál es su plan para contactar a las familias de los niños después de una evacuación?

¿Cómo tendrá en cuenta las necesidades individualizadas de los niños durante los procedimientos para mantenerse a salvo?

  • ¿Cómo aborda el desarrollo de los niños?
  • ¿Cómo satisface las necesidades únicas de los bebés, niños pequeños y niños en edad preescolar?
  • ¿Cómo apoyará las necesidades sociales y emocionales de los niños? ¿Adopta un enfoque informado sobre el trauma para que cada niño se beneficie de las prácticas que previenen una posible retraumatización?
  • ¿Cómo aborda las necesidades de los niños con discapacidades o afecciones médicas crónicas?
  • ¿Cómo apoya las necesidades de los niños que aprenden en dos idiomas?
  • ¿Cómo se asegurará de que los suministros de emergencia incluyan el equipo, los alimentos, los medicamentos y otros artículos que los niños podrían necesitar cuando se refugien en el lugar? ¿Cómo adaptará el plan a los niños con alergias durante el simulacro o evento?

¿Cómo cuidará la salud física, la salud mental y las necesidades individualizadas de los adultos durante los procedimientos para mantenerse a salvo?

Preste atención al autocontrol y los sentimientos de los adultos. Este tipo de simulacros pueden despertar ansiedad en todos, niños y adultos. Es importante que los adultos se controlen y presten atención a sus propios sentimientos antes de hablar con los niños bajo su cuidado. Los niños recurren a sus adultos de confianza cuando experimentan cosas nuevas y cuando se sienten ansiosos o confundidos. Necesitan saber que los adultos a cargo están disponibles para apoyarlos para que se sientan seguros de que los adultos pueden mantenerlos a salvo.

  • ¿Cómo obtendrá comentarios del personal sobre los simulacros?
  • ¿Cómo abordará las necesidades de salud mental de los adultos? ¿Adopta un enfoque informado sobre el trauma para que todos los adultos se beneficien de las prácticas que previenen una posible retraumatización?
  • ¿Cómo tendrá en cuenta la salud física o las necesidades médicas de los adultos durante estos simulacros?
  • ¿Cómo apoyará al personal después de un simulacro?

¿Cómo hará participar a las familias?

Es esencial que todas las familias conozcan los procedimientos de su programa para mantener a los niños a salvo en caso de que ingrese un intruso.

  • ¿Cómo obtendrá comentarios de las familias sobre los simulacros?
  • ¿Cómo les informará a las familias cuándo planea realizar un simulacro?
  • ¿Cómo ayudará a las familias a prepararse para discutir esto con su hijo antes y después del simulacro? Debajo encontrará consejos para hablar con niños pequeños.
  • ¿Cómo apoyará a las familias después de un simulacro?

Compartir

Una vez que haga un plan para mantenerse a salvo deberá informarle a todos qué esperar.

  • ¿Cómo compartirá el plan con todo el personal del programa? Si el programa varía según el entorno (es decir, en un lugar cerrado o al aire libre) o la opción del programa (p. ej., hogar de cuidado infantil familiar o basado en el centro), ¿cómo ayudará a que todos estén al tanto de las diferencias?
  • ¿Cómo compartirá el plan con maestros sustitutos, personal flotante o personal menos reguar del programa?
  • ¿Cómo compartirá el plan con las familias?
  • ¿Cómo alentará al personal y a las familias a hacer preguntas, y cómo les dará respuestas informadas y afectuosas a cualquiera de sus inquietudes?
  • ¿Cómo compartirá el plan con la policía local, el personal de emergencia y otros socios comunitarios?
  • ¿Con qué frecuencia analizará y revisará el plan para asegurarse de que refleje el conocimiento y la evidencia más recientes sobre lo que funciona mejor en estas situaciones?

Práctica

Es menos probable que los niños pequeños se asusten o se sientan molestos al participar en un simulacro para mantenerse a salvo cuando el ejercicio les resulta familiar, saben qué esperar y los adultos que los rodean expresan seguridad y confianza. Es importante establecer un cronograma de simulacros para ayudar a que el personal, las familias y los niños se sientan cómodos con la rutina. Puede seguir el mismo cronograma que otros simulacros de emergencia en su programa.

A continuación hay algunas ideas sobre cómo practicar simulacros para mantenerse a salvo con niños pequeños.

Considere las capacidades de desarrollo y comprensión de los niños pequeños (en inglés) y preescolares (en inglés). Puede que los niños pequeños dependan completamente de los adultos para manejarlos durante una emergencia.

Los niños pequeños pueden:

  • Seguir instrucciones de dos o tres pasos.
  • Imitar las acciones de adultos y compañeros de juego.

Los niños en edad preescolar pueden:

  • Practicar comandos básicos de seguridad como "Salir" (evacuar) y "Esconderse" (mantenerse fuera de la vista, con las luces apagadas, y permanecer en silencio).
  • Comprender el concepto de "Mantenerse lejos", cuando un adulto traba y bloquea las entradas de las aulas para "Mantenerse lejos del peligro".

Use estas palabras e ideas cuando hable con niños pequeños.

Hágales saber a los niños que hacemos muchas cosas para mantenernos a salvo, como usar un casco, usar el cinturón de seguridad, mirar a ambos lados antes de cruzar la calle y lavarnos las manos. Dígales que estos simulacros son para ayudar a todos a mantenerse a salvo.

Hablar con los niños, incluso con los bebés, sobre lo que está sucediendo a su alrededor es fundamental para ayudarlos a sentirse seguros. Cuando los niños pequeños saben qué esperar y los adultos a su alrededor están tranquilos, es menos probable que pierdan su regulación emocional.

Brinde explicaciones cortas sobre el ejercicio. Por ejemplo, podría decir: "Hoy, tendremos un simulacro para 'mantenernos a salvo' a fin de practicar cómo mantenernos a salvo en la escuela. Los adultos deben mantenerte a salvo. Practicaremos sentarnos y quedarnos quietos. Sabemos que es difícil quedarse quieto y en silencio, pero queremos que estés lo más en silencio posible y sigas nuestras instrucciones". Tenga en cuenta que los niños muy pequeños pueden permanecer quietos y tranquilos durante un par de minutos como máximo.

Cuando cuide a bebés y niños pequeños, use sus estrategias de calma diarias para consolarlos y ayudar a su regulación. Cuando hable con niños en edad preescolar sobre un simulacro para mantenerse a salvo, pregúnteles qué saben sobre el simulacro: "¿Por qué creen que practicamos estos simulacros?" Esté preparado, ya que los niños a menudo saben más de lo que pensamos. Al saber lo que sienten o piensan sobre los simulacros, puede tener una conversación sobre cómo los simulacros los mantienen a salvo y responder a sus preguntas e inquietudes. Reconocer los pensamientos y sentimientos de los niños brinda soporte a su rol como cuidador de confianza.

Use una historia social.

Puede personalizar una historia social (en inglés) para su aula y situación de simulacro. Puede agregar algunas fotos del espacio seguro o cómo se verá el aula durante el simulacro. Un ejemplo para la historia podría ser:
"A veces debemos practicar cómo mantenernos a salvo. Estar seguro significa muchas cosas diferentes. Puede significar usar un casco cuando estás en un juguete de montar. También puede significar abandonar el edificio durante un simulacro de incendio. A veces, cuando practicamos cómo mantenernos a salvo, debemos estar en silencio, ir a un lugar especial, apagar las luces y cerrar las persianas. Cuando nos mantenemos a salvo, podemos leer libros, descansar o pensar en lugares y personas que nos hacen felices".

Use literatura infantil.

  • Storm Is Coming (en inglés) (Se acerca una tormenta) de Heather Tekavec y Margaret Spengler
  • ¿Cómo se cuidan los dinosaurios? de Jane Yolen y Mark Teague

Prepárese para las preguntas que los niños podrían hacer

Las familias podrían hacer uso de estas preguntas y respuestas cuando hablan con los niños antes y después de los simulacros para mantenerse a salvo. Como siempre, los maestros y las familias son quienes conocen mejor a los niños. Puede adaptar las respuestas para que se adapten mejor a su situación.

P: ¿Qué es un simulacro para mantenerse a salvo?
R: Este simulacro nos ayuda a mantenernos a salvo si hay alguien que no debería estar en nuestro edificio, en nuestra aula o en nuestro patio de juego.

P: ¿Por qué tenemos que hacer esto?
R: Nuestro trabajo es mantenerlos a salvo. Estos simulacros nos ayudan a mantenerlos a salvo.

P: ¿Por qué tengo que estar en silencio?
R: Estar en silencio puede ayudarnos a escuchar instrucciones e información importante.

P: ¿Cuándo terminará?
R: La mayoría de las veces, nos sentaremos en silencio solo unos minutos. Luego vendrá otro adulto y nos avisará cuando termine el simulacro sobre cómo mantenernos a salvo.

Procedimientos a seguir durante un evento de intrusión

  • Siga el plan. Use el plan que desarrolló su programa y que fue compartido con el personal y las familias, y practicado regularmente con adultos y niños. Siga los procedimientos de reunificación de su programa. Tener un sistema para enviar mensajes de texto a las familias podría ser útil, ya que los servicios telefónicos podrían verse desbordados con el volumen de llamadas. Quizás no sea posible encontrar al padre de familia, tutor u otras personas designadas de un niño. Haga todo lo posible para comunicarse con la familia de cada niño y los contactos de emergencia lo antes posible.
  • Informe. Si es posible, llame al 911 o a su sistema local de manejo de emergencias y dígales dónde está el intruso. No asuma que alguien más ya ha llamado.
  • Evalúese a sí mismo. Haga una pausa y respire profundamente para que pueda atender las necesidades de los niños y sus propias necesidades.
  • Acompañe. Hable con los niños sobre lo que sucede a su alrededor, incluso si no entienden las palabras. Por ejemplo, "Ese ruido fue fuerte y te asustó. Voy a levantarse, abrazarte y mantenerte a salvo". Apoye los grandes sentimientos de los niños sin minimizar o negar la forma en que se sienten.
  • Brinde seguridad. Dígales a los niños que usted está allí para mantenerlos a salvo. Haga hincapié en la seguridad. Permita que los niños expresen sus preocupaciones y hagan preguntas. Tranquilícelos y sea honesto de una manera apropiada para el desarrollo. Corrija cualquier preocupación inadecuada que puedan tener recordándoles suavemente lo que está haciendo para mantenerse a salvo en ese momento.
  • Hable con sinceridad. Use un lenguaje simple y apropiado para la edad de los niños. Hágales saber a los niños lo que sucederá luego. Repita que es normal tener miedo. Todos sienten miedo cuando están en peligro o cuando no saben lo que está pasando. Ayude a los niños a entender que sus reacciones son normales.
  • Manténgase consciente de sí mismo. Recuerde, los niños responden al tono y volumen de la voz, y a las emociones. Sea receptivo en lugar de reactivo y sea consciente de sus propios sentimientos y de cómo responde a las preocupaciones de los niños.

Recuperación

Luego de un evento, es probable que los adultos y niños en su programa necesiten apoyo inmediato y continuo. Es importante saber de antemano quién puede ofrecer apoyo de salud conductual después de un trauma, como primeros auxilios psicológicos (en inglés), en su comunidad. Si tiene una relación formal con un consultor de salud mental o una agencia comunitaria de salud mental, incluya detalles en el acuerdo sobre cómo pueden ayudar después de una crisis. Es fundamental que todos, personal, familias, líderes de programas, miembros de la comunidad y otros, tengan oportunidades para discutir su experiencia. Tenga en cuenta que cada persona necesitará apoyo individualizado para ayudar a recuperarse. En la medida de lo posible, brinde al personal la flexibilidad que necesiten para reanudar las actividades y horarios habituales.

Esté atento a los signos de trauma. Es normal que los niños y adultos sientan ansiedad a causa de los tiroteos y los eventos violentos. Haga participar a los profesionales de la salud mental en el proceso de recuperación. Si los niños parecen extremadamente temerosos, enojados o retraídos durante o después de un evento, hable con sus familias acerca de buscar ayuda profesional. También tenga en cuenta que las fechas de aniversario del evento pueden ser un momento particularmente vulnerable para que surjan recuerdos traumáticos.

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